Dame la Mano

Hoy quiero compartir con ustedes un poema que es muy especial para mí.
Lo leí por primera vez en primero básico ya que estaba en mi libro de texto y me encantó aún más cuando me dí cuenta que también era una canción. Me lo aprendí de memoria.
En ese tiempo yo vivía en Santiago. Mis amigos solo eran hombres... pero había una excepción. Yo tenía una amiga. La única mejor amiga que tuve en Santiago. Vivimos momentos inolvidables. Y este poema de Gabriela Mistral era como nuestro himno de amistad. Hacíamos una ronda entre las dos y la cantábamos.
Pero un día yo me tuve que ir de Santiago. Dejé mi colegio y a mis amigos. Pero a la que jamás voy a olvidar es a ella, y los días que nos divertimos juntas, cuando todo era alegría y diversión....

Dame la Mano

Dame la mano y danzaremos;

Dame la mano y me amarás.

Como una sola flor seremos,

como una flor, y nada más...

El mismo verso cantaremos, 

al mismo paso bailarás.

Como una espiga ondularemos, 

como una espiga, y nada más...

Te llamas Rosa y yo Esperanza;

pero tu nombre olvidarás,

porque seremos una danza, 

en lo colina y nada más.